Bueno, yo no le buscaría tres pies al gato. Desde luego que el tipo no debe ser muy celoso pero imagino que lo hacen porque hay una clientela a la que le gusta el asunto. Yo sólo he hecho un trío una vez y no fue una gran experiencia. Lo que en las pelis parece muy sexy no lo es tanto (al menos en mi caso) en la realidad. El tipo era muy majo y yo le dije desde el principio que no quería nada con él. La cosa empezó bien porque el chaval le daba a cuatro patas mientras ella (muy bonita, por cierto) me practicaba una felación. Esa parte si me gustó porque yo sólo le veía si miraba, cosa que no hacía, y la posición me impedía ver otra cosa que su cara, en caso de que hubiese mirado. Lo que ocurre es que quise fornicar y ella se puso en postura del misionero. Miré hacia la derecha (donde él se encontraba) para asegurarme de que no estuviera muy cerca. El gachó, pensando quizá que buscaba su intervención y siendo pues amable, le introdujo el fruto viril, grande por cierto, en la boca. Cada uno es cada uno pero, en mi caso, ver un enorme pollón como a diez centímetros de mi rostro, no me hizo ninguna gracia. El chaval debió darse cuenta porque, cuando acabé, me dijo que otro día podía quedar con ella a solas. En fin, mi consejo, si se me permite, es que el que tenga la fantasía y los medios para procurársela, que lo haga y salga de dudas. Sin embargo, que tenga en cuenta que en la vida real las cosas no son casi nunca como en las pelis. No fue una experiencia traumática. De hecho, lo pasé bien pero, claro, si contratas a dos, pagas por dos, y si disfrutas menos que follándote a dos tías, no parece inteligente hacerlo. De todos modos, reitero, si no le faltan a uno los medios, que pruebe por sí mismo y decida. Si el puterío es sólo un capricho que puede permitirse de vez en cuando, busque a una mujer sola y, ahorrándose la mitad del dinero, obtendrá una experiencia mejor.
Buenas noches.