Visto que no hay ninguna experiencia con esta mujer cuento yo la mía, aunque sea una no-experiencia. La encontré en una de las páginas de contactos de internet. Dice ser de Grecia y tener 36 años. La verdad es que si las fotos son suyas, pinta muy bien. La contacto por wasap y me da la información: a partir de 30 euros, masaje de todo tipo y terminación sexo, francés no final o "delicada" manipulación con la mano. A los pocos días veo que atiende toda la semana, así que le mando el sábado un wasap para vernos hoy y dice que le viene bien. Pone que está en la calle Xàtiva, así que imagino que debe de estar por Pelayo, Convento Jerusalén y alrededores, por si acaso le pido que me diga la calle porque así luego, en el momento de la ******, ya la espero por la zona y no que me pille en la otra punta (y sobre todo porque puede que resulte que ni siquiera sea esa ese barrio y me toque coger un taxi a toda prisa para llegar), ya sabeis que muchas veces en la página web juegan al despiste. Primer mosqueo: ese ya no me lo contesta. Hoy, con mi buena fe, me voy para allá y me siento en uno de esos banquitos de la calle peatonal enfrente del outlet de Mango. Voy con tiempo y 10 minutos antes de la hora de la ****** le mando un wasap para avisarla. Segundo mosqueo: sale como que no lo tiene activo. A esas alturas ya no me quedaban dudas de que otra vez me habían dado plantón (ya me pasó con Madison -conté la experiencia-, que por cierto me tiene bloqueado (con lo guapa que es), pero aquello lo puedo hasta entender, porque me debió ver por el telefonillo y lo que por allí veía no le debió convencer, pero en este caso, ni eso). Le di 10 minutos de cortesía y le mandé un mensaje para decirle que me podía haber avisado. No me contestó, naturalmente, aunque luego salía que sí lo había leído. La verdad es que me asombra que pasen estas cosas. Tanto ellas como nosotros merecemos respeto y avisar no cuesta nada. Puedo suponer que a ella no le gustará nada que le hagan lo mismo, así que debería aplicarse el cuento, y la verdad es que estas cosas solo acaban creando desconfianza. En fin, es lo que hay. Si algún camarada ha estado con ella y se anima, que cuente su experiencia. Por lo menos para saber lo que me he perdido (o no).