Hola! Este mi primer FT, porque soy muy nuevo en este mundillo. Espero que os sirva
- Nacionalidad: No lo sé. Parecía tener el caribe en la sangre.
- Edad: 30 y pico
- Direccion : Cerca de viveros.
- Valoracion de las Instalaciones: Habitación pequeña. Baño fuera.
- Precio del servicio y duración: 60 € media hora y sus múltiplos.
- Fecha del encuentro (aproximadamente) : viernes pasado.
- Valoracion Cara,cuerpo, tetas: Mejor que en las fotos. Guapisima.
- Actitud: La mejor.
- Besos: Todos los que quieras, desde el momento que entras en el piso
- Fuma: No noté nada.
- Francés: Natural. Buenisimo y hasta el final.
- Griego: No pregunté.
- Folleteo: No probé.
- Lo mejor: Todo ella.
- Lo peor: El desorden del baño.
- La recomiendas?: Sin duda.
- Valoración de la experiencia (de 0 a 10): 10
Relato de la experiencia:
Como os dije en la intro soy muy nuevo en esto. Esta es mi segunda experiencia con una lumi. La primera fue con una lumi fría y distante lo cual hizo que tardara mucho en dar el paso para tener una segunda c###.
Desde el día que me decidí hasta ese mismo día, fui un manojo de nervios. ¿Qué quieren que os diga? Seré tonto o algo así. Pero entre el covid, la mala experiencia anterior, las dudas de si valía la pena o si mi novia se enteraría ... mi cabeza daba más vueltas que el tambor de una lavadora. Me animé y le escribí y como dijo alguien en una experiencia de este foro, todo empezó con un microrelato porno que puso la lavadora directamente a centrifugar. Hablé con ella un lunes, pidiendo la c### para el viernes. Le pregunté si el francés era hasta el final y me dijo que solo con la tarifa de una hora. El jueves confirmé el encuentro y el viernes estaba allí, cerca de Viveros lleno de nervios.
Entré y me recibió con la lencería de las fotos. Espectacular. Un cuerpazo. Y lo mejor, una sonrisa increíble. A penas me vió, cerró la puerta y empezó a morrear y tocar todo. Mis nervios estaban a flor de piel. Temblaba. Y todo por mi culpa de mi cabeza que no vivía el momento. Pasamos a la habitación. Más morreos. Mientras me morreaba, y me besaba el cuello, me susurró; ¿Cuanto tiempo te vas a quedar conmigo cariño? Le respondí que una hora, le dí el regalito y le pedí perdón porque me estaba meando. Fui al baño. Y de los nervios no podía mear!!! Para colmo me torturaba a mi mismo por estar nervioso! Respiro hondo y vuelvo a la habitación. Le cuento lo de los nervios y me intenta tranquilizar a besos. Me pongo cachondo, creo que ella también, la toco un poco y ya tocándola con la braga puesta, empezaba a retorcerse y a mojarse. Me empieza a susurrar guarradas y la sigo tocando. La tumbo en la cama, se quita la braga, y empiezo a comerle el coño. Depilado casi totalmente. Mientras pasaba la lengua, la empiezo a masturbar y acaba mojandose de una manera increíble. Os juro que a mi me pone mucho ver como una chica acaba. Y esta lo hacia así sin mucho esfuerzo por mi parte. Continuo currando yo y acaba por segunda vez. Yo flipaba, estaba en la gloria. Empieza a devolverme el favor. Primero poniéndose en cuatro en la cama y yo de pie, y luego se pone de rodillas en el suelo y mientras me la chupa me pone tan loco que no duro ni dos minutos y le acabo en la cara. Me quería matar, 2 minutos!!! Mis nervios otra vez!!! Mientras acababa yo decía: “No, no no... “. El gili de mi hacía dos días que no me pajeaba (grave error). Y ahí me ves a mi de pie, pidiéndole perdón a Marta por acabar tan rápido. Ella me intentaba tranquilizar, que no pasaba nada, que “no hay por qué pedir perdón en el placer” y que me haría acabar de nuevo. Vamos al baño, nos lavamos, regresamos a la habitación, me pongo boca abajo y me empieza a dar un masaje bastante bueno. Me pide girarme y empieza a chuparme la polla de nuevo. No me pregunteis por qué pero eso no se levantaba ni con el gato del coche. Parecía hecho de play doh. Ella lo hacía muy bien pero yo no podía. Lo escupia, saboreaba los huevos, me decía guarradas, pero eso parecía desconectado. Le digo que pare, porque me ponía aún más nervioso. Le explico que no sé por qué sigo nervioso y que no sé si podré. Y ahí vino la actitud 11 de ella. Me dice: “Cariño, si quieres, nos esperamos un poquito y lo intentamos… Y si ves que no vas a poder, porque ahora es que no, si quieres te devuelvo la mitad del dinero. Como sólo ha pasado media hora, lo dejamos aquí, te doy el dinero y quedamos para otro día”. Me sabía hasta mal aceptar. Al principio dije que no, hablamos tonterías y luego me lo volvió a ofrecer y acepté. Me hizo sentir tan bien que se ha ganado tenerme como cliente la próxima vez. Lo mejor de esta experiencia ha sido ella. Porque la próxima vez iré con menos nervios y seguro lo pasaré mejor. Ella ha sido un amor en todo momento. Me ha hecho sentir super bien. Todo muy natural. Fogoso mientras duró y dulce cuando terminó. Al final parecía que estuviese hablando con una follaamiga. Super amable siempre. Le conté mi experiencia anterior y me dijo: “si te dedicas a esto te tiene que gustar”. Y el resultado de esta experiencia es que la próxima vez no voy a dudar en llamarla a ella. Porque sé que si alguna vez logro calmar mis nervios será con ella.