Yo prefiero comprarlo en una farmacia.
Ella me interrumpió "John, no puedes hablar en serio, ¡es casi lo suficientemente mayor para ser mi padre!" ella me devolvía la sonrisa, incitándome con su sonrisa juguetona.
"¿Y? Me has dicho muchas veces que encuentras atractivos a los hombres mayores."
Se sonrojó, tartamudeando para salvarse a sí misma "... Sí ... bueno. Él ... él es negro".
Me reí "Golpea dos Ash, no sería el primer tipo negro que encontraras atractivo". En varias ocasiones, mientras pasaba frente al televisor durante un evento deportivo o después de una película, admitió haber encontrado atractivo a un chico negro. Nunca me molestó, quiero decir que no era racista en lo más mínimo. Además, encontré atractivas a muchas mujeres negras.
Su cara ahora estaba sonrojada, obviamente sorprendida con las manos en la masa, tropezó con una excusa "Yo ... Maldita sea John. Bien, me atrapaste. Pero no creo que estuviera coqueteando con él". se inclinó hacia abajo, quitando el polvo una vez más.
Me sorprendió un poco que lo admitiera tan fácilmente, pero no puedo decir que me molestara mucho. De hecho, me sentí mal por hacer que ella se retorciera "Oh, relájate Ashley, ni siquiera estoy enojado. ¿Cómo podría estarlo? Es probablemente la mayor emoción que ha tenido en años, tener a una joven caliente coqueteando con él".
Ella habló desde debajo de la mesa, vi como su hermoso trasero se movía en el par de pantalones cortos rosas que estaba usando. "Me siento mal por él."
Eso me sorprendió "... ¿Por qué? Parece que le va bastante bien, nena". Cogí unas copas de vino que habíamos dejado en el salón la noche anterior.
"Está viudo, John, y no parece que reciba mucha atención femenina. Siempre he tenido debilidad por las personas que pierden a sus cónyuges".
Me enjuagué los vasos y me acerqué a ella, todavía mirando su precioso trasero. "Así que coqueteaste con él porque es viudo, lo entendiste". Me reí.
"Te ríes, pero inconscientemente esa fue probablemente parte de la razón". Ella me miró desde debajo de la mesa, atrapando mis ojos mientras yo miraba su trasero. "Deja de mirarme el culo, pervertido."
"Tienes razón, supongo que el único tipo al que se le debería permitir mirarlo es Richard, ¿verdad?"
Ella se rió exasperada "Oh Dios, ¿vas a parar ya? Nunca te había visto actuar tan celosa".
"Cuando te empapabas con el agua del fregadero, no podía dejar de mirarte. Casi tuve que hacer sonar la alarma de incendios para llamar su atención, te vio caminar todo el camino de regreso a la cocina".
"Bueno, entonces estoy seguro de que él tendría un día de campo si estuviera aquí ahora mismo". Movió el culo para darle un efecto juguetón.
No estaba seguro de qué se trataba de ese comentario, o de su movimiento de culo acompañado, pero me provocó una excitación increíble. Inmediatamente entré en una neblina de lujuria, cayendo de rodillas detrás de ella. Rápidamente agarré su pretina y le quité los pantalones cortos rosados del trasero. Para mi consternación, noté que sus labios ya estaban húmedos, una capa transparente de su esencia se adhirió a la tela cuando la quité, exponiendo finalmente su hermoso sexo.
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Ella miró hacia atrás presa del pánico, pero no me detuvo. No tenía adónde ir, el resto de su cuerpo estaba inmovilizado debajo de la mesa "John ... ¿Qué estás haciendo?"
No le respondí con palabras, simplemente empujé mi polla erecta dentro de ella. Su cabeza se arqueó hacia atrás y golpeó la mesa, pero no se quejó.
Terminó rápidamente y nos juntamos, mi semen se mezcló con su propia liberación sexual mientras nuestros órganos pulsaban de placer al unísono.
Cuando finalmente me retiré, Ashley habló, soplando su cabello fuera de su cara "Wow ... Tal vez tengamos que invitar a Richard a que me coma un poco más. ¿Qué te pasa? ella rió.
Yo mismo no estaba muy seguro, mientras buscaba respuestas, miré el trasero de mi esposa, ahora desnudo, con el coño en exhibición. Ashley era tan jodidamente hermosa. Ella se dio cuenta de que la miraba fijamente y la movió una vez más, hablando con aire bochornoso. "Apuesto a que realmente le gustaría echarle un vistazo ahora mismo". Miré hacia su rostro y vi que se estaba mordiendo el labio inferior de manera sexual. Me sorprendió lo abiertas y traviesas que fueron sus palabras, esto era nuevo para nosotros, y me sorprendió lo mucho que me emocionó. Le di una palmada en la mejilla derecha de su trasero, sosteniéndolo firmemente. "¿Quién no lo haría?" Respondí.
Pasaron las semanas y luego los meses. Ashley y yo nos habíamos instalado completamente en el apartamento. Mi nueva posición en el trabajo iba bien, pero todavía no había encontrado el tiempo para liberarme y volver a conectarme con el gimnasio. Nuestra amistad con Richard también floreció. Le había ganado algo de dinero rápido con inversiones y decidió ir a lo grande en algunos juegos de poder. Nos veíamos al menos un par de veces a la semana, ya sea para cenar o para planificar movimientos financieros. A veces planeábamos en su casa, a veces en la nuestra. Rápidamente me di cuenta de que prefería lo último, debido a que asumí que era una mejora obvia en el escenario. Parecía amar cualquier atención que Ashley le prestara, y realmente no podía culpar al chico. Ashley, por su parte, no hizo mucho para frenar sus coqueteos con Richard. En realidad, parecía disfrutar coqueteando con el hombre.
Ash siempre era juguetón con él, no temía.